Novelita Laliter

Novelita Laliter
Leean y Comenten :)

jueves, 26 de diciembre de 2013

Capítulo 13: "Explicaciones"



Hola chicas primero que nada MUCHISIMAS GRACIAS LLEGAMOS A MAS DE 110.000 VISITAS :D eso es genial y es gracias a ustedes así que se los agradezco muchisimo :) y....

INFO IMPORTANTE:
En algunos de los próximos capítulos podrán ver que utilizo canciones, aca arriba les diré que canción es por si quieren bajarla :)

-La canción de hoy es: White Horse - Taylor Swift

Ahora si las dejo con el capítulo :) Bye...
_______________________

Novela: "Entre Hermanos"
Capítulo 13: "Explicaciones"

Lali
Mis ojos se abrían como si estuvieran pegados con un fuerte pegamento, ya que costaba demasiado abrirlos. Cuando por fin logre despertarme, me vi en una habitación un tanto extraña. El color blanco abundaba a mí alrededor y tenía un aparato conectado a mí. Se lo que es, no es la primera vez que lo necesito, una maquina de maldito oxígeno.
«Dices que lo sientes 
Te sale esa cara de ángel 
solo cuando la necesitas.»

Mi mamá estaba a mi lado sosteniendo mi mano y con sus ojitos llorosos que se alegraron de verme despierta, no era la primera vez que vivíamos esto, ella lo sabía.
Cande ingresó justo a la sala y se sorprendió de verme despierta.

«Mientras yo iba y volvía todo este tiempo 
Porque honestamente creía en ti.»

— ¡Lali! Qué bueno que hayas despertado, nos pegaste semejante susto. —Dijo Cande mientras dejaba un par de cafés en la mesita de noche de la habitación.
—Cande, despacio que recién se despierta —Dijo mamá.
—Nos preocupaste a todos.
—¿Todos? —Pude pronunciar por fin.
«Pasaron los días aguantando 
Chica estúpida 
Debí saberlo, 
debí saberlo...»

—Oh si, los hermanitos están en el pasillo, te digo la verdad Lali. Peter se está comiendo las uñas y Pablo no deja de caminar de lado a lado y me ponen los nervios de punta a mi —Dijo Cande.
— ¿Qué hacen acá? —Pregunté.
—No hables tanto, vieron la ambulancia afuera y se vinieron detrás con el auto. —Esa fue mamá.
— ¿Cuánto hace que estoy acá?
—Ingresaste a la madrugada y ahora ya son las 5 de la tarde.
— ¿Estuvieron ellos y ustedes todo ese tiempo acá?
«No soy una princesa 
Esto no es un cuento de hadas 
No soy la única que cargabas en tus brazos 
ni la única a la que llevabas a lo alto de las escaleras.»

—Claro tonta, sin vos no vamos a ningún lado —Dijo Cande.
— ¿Y cuándo me puedo ir?
—No sabemos aún, ahora llamo al doctor para que te revise y vemos.
Al rato de ser revisada por el señor Perkins me dijo que podía irme a casa pero si me volvía a pasar, deberían internarme un tiempo. Claro me dejo ir más que nada por mi gran insistencia de estar en mi casa con mi cama y no acostada aquí, por eso accedió.
«Esto no es Hollywood 
esto es una ciudad pequeña 
Yo era una soñadora 
antes de que te fueras y me abandonaras.»

Planeaban llevarme en sillas de ruedas y devolverme a casa en ambulancia pero odio llamar la atención y la mirada de lástima, así que dije que me cuidaría pero prefería salir caminando como alguien normal y no alguien herida.
Salimos al pasillo y vi a Pablo y Peter que se encontraban sentados tranquilos porque ya Cande se encargo de informarlos de mi despertar, aunque ellos aún no me habían visto.
—Lali, estas casi igual que antes —Dijo en broma Peter.
—Oh gracias, entonces la operación plástica casi no se nota —Dije siguiendo la broma.
«Ahora es muy tarde para que tú 
y tu caballo blanco regresen.»

Los saludé a ambos y luego volvimos hacía mi casa y todos, absolutamente todos ingresaron a mi casa.
—Chicos pueden ir a su casa si quieren, yo estoy bien.
— ¿Bien? Lali te desmayaste. —Dijo Pablo.
—No es la primera vez.
Ellos me miraron esperando respuestas y sabía que era momento de hablar.

«Quizás fui ingenua 
me perdí en tus ojos 
y realmente nunca tuve la oportunidad.»

—Vengan —Dije.
Mamá fue a preparar algo para cenar. Cande se sentó a mi lado en el sofá mientras apretaba mi mano porque sabía que esto costaría. Peter y Pablo se sentaron delante de nosotras.
—Yo me mude a Wisconsin hace mucho, que fue el último lugar en el que estuvimos antes de venir acá. Allá conocí a esta maravillosa personita —Dije señalando a Cande— Pero también conocí a personas de las que me arrepiento haber conocido.
«Mi error fue que no sabía 
que estar enamorada significa 
tener que luchar para conseguir la ventaja.»

— ¿Benjamín no? —Preguntó Pablo.
— ¿Quién es ese? —Preguntó Peter.
—No interrumpan muchachos, no es fácil contar esto —Dijo Cande y ellos asintieron.
«Y ahí estas arrodillado 
rogando perdón, rogando por mi 
Justo como siempre quise 
pero lo siento mucho.»

—Conocí a más de una persona mala pero entre ellas estaba Belen Chavanne, ella era la chica popular del colegio e intentaba hacerme la vida imposible, ella salía con el chico más hermoso y popular de todo el colegio ¿Quién? Benjamin Amadeo, ella lo planeo todo junto con él, claro. Él me dijo que habían cortado pero no era verdad, todo fue un plan. Yo era la chica tímida, la difícil, la imposible diría yo. Era virgen, ni siquiera había besado a nadie. Entonces él me prometió miles de cosas, hasta el cielo me prometió y yo, la estúpida, le creí todo. Él me engaño durante los últimos 2 años de secundaria hasta que lo consiguió. Él me arrebato la virginidad. ¿Lo peor? Lo filmó todo, luego esa cinta la mostró delante de todo el colegió y allí estaban Belen y Benjamín riéndose de mí, delante de mis ojos. Yo lo ví a Benjamín engañarme varias veces y no solo con Belen pero lo perdonaba como estúpida y así lo pague. La única que siempre me apoyo y estuvo ahí fue Cande. Por eso nos fuimos de Wisconsin y terminamos acá. Aunque en realidad yo no quería irme, sabía que podía con eso y con más pero mamá insistió, a ella le dolió más que a mí como todo el pueblo veía el video y se reían delante y a espaldas nuestras.
«Porque no soy tu princesa 
esto no es un cuento de hadas 
Algún día encontraré a alguien 
que me trate bien.»

Mis lágrimas comenzaron al recordar toda esa humillación.
—Desde ese momento yo comencé a ser asmática, por eso despertar conectada a un aparato de oxígeno no es nuevo para mí. —Terminé.
—Lali ¿te das cuenta que no solo te engañaba a ti, también a esa chica que tanto se burlaba de ti? —Dijo Pablo.
—Sí pero a ella nunca le importó, él era el títere de Belen. Pero yo si me había enamorado de él y lo único que él hizo fue engañarme y hacer promesas falsas solo para conseguirme en su maldita cama.
«Esto es un gran mundo, 
esa era una gran ciudad, 
que ahora esta desapareciendo 
en mi espejo retrovisor.»

—¿Por eso odias que sea como soy no? —Preguntó Peter.
—Se trata un poco de eso, es que me hirieron tanto que no soporto ver cómo le haces eso a otras mujeres.
—Tú no entiendes Lali, yo no estoy con chicas vírgenes sé que soy una mierda y no deseo ser la primera vez de nadie porque nadie se merece semejante mierda para su primera vez, con las mujeres que yo estoy es porque ellas también quieren. Está bien engañe muchas veces a quien tenía al lado pero eso ya es otra cosa, además Lali yo te jodo a ti porque sé que nunca accederías a acostarte conmigo y menos después de saber todo eso.


«Es demasiado tarde 
para que me atrapes.»

Lo peor de todo es que él no sabía cuánto lo deseaba yo entre mis sabanas y lo mal que me hacia quererlo ahí a mi lado.

_______________________
Besos y espero que les guste el capítulo de hoy :)

Otro blog: http://amorencopos.blogspot.com.ar/

Twiter: @Casijuegosca 

Cielo

lunes, 16 de diciembre de 2013

Capítulo 12: "Recuerdos malditos"


Novela: "Entre Hermanos"
Capítulo 12: "Recuerdos malditos"

Lali
Busqué entre mis películas, separe un par de ellas y pude ver como el inspeccionaba todo mi cuarto sentado en mi cama.
—Quédate quieto, no toques. Voy al baño y vengo —Dije.
Deje las seleccionadas sobre la cama al lado de Peter y fui al baño para hacer mis necesidades, cuando salí no podía creer lo que veía.
Peter estaba en mi cajón íntimo con un corpiño entre sus manos y lo estaba… ¿oliendo? ¿Quién demonios hace eso?
— ¡Suelta eso! —Dije exaltada.
Me acerque a él y se lo arrebate de las manos, lo puse de nuevo en su lugar y cerré rápidamente mi cajón.
—Wau Lali nunca creí que usaras tangas —Dijo riendo.
—Sos un desubicado —Le dije casi gritando.
—Me encantaría ver qué tal te quedan.
—Déjame en paz ¿Quieres?
—Lo pensaré… No —Dijo haciéndose el interesante.
— ¿Por qué sos tan molesto? —Dije mientras recogía las películas sobre la cama.
—No lo soy —Dijo— no parare, Mariana. Hasta tenerte donde quiero.
—Y eso sería… ¿Tu cama?
—Exactamente allí te quiero.
El se acerco a mí y sabía que si no me resistía esto terminaría mal. Me aleje de él con las películas y comencé a bajar las escaleras, a él no le quedo otra que seguirme.
Vimos “Me quieren volver loco” que fue una de las seleccionadas y luego pusimos “Papá por un día” pero vimos una parte y la sacamos porque nos cansamos de ver películas.
— ¡Ya se! —Dijo Cande— Juguemos a verdad o consecuencia.
—No es tan divertido si somos cuatro —Dije.
—Probemos —Dijo Pablo.
—Yo empiezo —Dijo Cande— Peter ¿verdad o consecuencia?
—Verdad —Contestó.
—Muy bien, ¿con cuantas mujeres estuviste?
—No recuerdo el número
—Seamos más específicos, ¿con cuantas estuviste estas dos semanas? —Volvió a preguntar ella.
—Bueno… dos —Dijo él.
—Ahora te toca a vos preguntar —Dijo Pablo.
—Lali, ¿verdad o consecuencia? —Pregunto Peter.
—Eh… verdad —Dije no muy convencida.
— ¿Es verdad que hace dos semanas te querías acostar conmigo?
Me miraron los tres expectantes esperando una respuesta a eso.
—Si… —Dije insegura— pero eso fue hace dos semanas. Pablo ¿Verdad o consecuencia?
—Consecuencia.
—Debes llamar a la primera chica de tu lista y decirle… Pablo Lanzani quiere tener sexo contigo —Me reí de mi ocurrencia y todos rieron conmigo.
—Tú sí que estás loca Mariana —Dijo Pablo riendo.
Pablo hizo lo dicho, resulto ser que la primera chica de su lista era una de sus ex novias y según parece, ella se emocionó. Fue muy gracioso porque la chica estaba contenta de que su ex se quiera acostar con ella, pobre muchacha ella nunca supo que fue una broma de un tonto juego.
—Cande ¿verdad o consecuencia? —Dijo Pablo.
—Mmm si es besar a alguno de ustedes consecuencia, pero… en este caso prefiero verdad— Dijo riendo.
—Bien, ¿te acostaste con Agus?
—Claro que no… creo que su amigo es algo gay, en serio que yo quería pero él es todo un flojo —Dijo sin parar de reír— ¿no le preguntaron nunca sus preferencias?
—Por lo que tengo entendido él es como Peter —Dijo Pablo, dejando a Peter como un mujeriego.
—Bueno… no soy el único Pablito o ¿Qué hiciste con la chica que te llevaste afuera de la fiesta? Seguro que hablaron de la vida —Dijo Peter irónico.
—Bueno, no peleen muchachos —Dije.
— ¿Qué podemos hacer ahora? —Dijo Cande.
—Una orgía —Dijo Peter riendo.
—Eres un cerdo —Dije.
—No es tan mala idea —Dijo Cande que también reía.
—Esta chica me cae bien —Dijo Peter mientras chocaba su mano con la de Cande.
Ya eran cerca de la 1 y media de la madrugada.
— Mejor vamos nosotros Peter, ya es tarde.
—Son vacaciones, aburrido.
— ¿Vamos a tomar un helado? —Dijo Cande.
—Vamos —Dijo Pablo.
Yo agarré mis llaves y salimos hacia la heladería en el auto de Peter.
En la heladería cada uno pidió sus sabores y nos sentamos en una mesa.
—Cande me estuvo molestando con lo de tomar helado durante todo el día.
—Y ahora ya se hizo realidad —Dijo Pablo.
—Por suerte sí, porque no la hubiera aguantado más tiempo.
— ¡No seas mala! —Exclamó Cande— Estos deben de ser los mejores helados del mundo —Dijo saboreando sus gustos elegidos.
—Hay mejores lugares por aquí, con suerte Cande los conocerás. En serio es un gran lugar aunque el aspecto no sea de una ciudad y parezca más bien un pueblo —Musitó Peter.
—En realidad creo que es más un pueblo que una ciudad hermanito —Retruco Pablo.
—Siempre tienes que ganar ¿verdad?
—Ya basta, son hermanos dejen de comportarse como extraños —Dije.
Tomamos nuestros helados y mientras dábamos unas vueltas en el auto, volvimos a las casas correspondientes.
—Bueno chicos supongo que nos vemos mañana, estuvo muy divertido hoy —Dijo Cande.
—Yo pienso igual, la pase genial —Esta vez fue Pablo.
—Nos vemos mañana —Dije mientras saludaba a cada uno.
—Adiós Lali, adiós Cande —Terminó Peter.
Nos acostamos apenas pudimos prepararnos con nuestros pijamas, pero a pesar de mi gran intento yo no pude dormirme fácilmente. Baje hacía la cocina y por algún maldito motivo comencé a recordar a Benjamín y sus putas y malditamente promesas rotas.
—Siempre te cuidaré mi bella Lali— Había dicho segundos antes de comenzar a tener por primera vez relaciones conmigo.
—Siempre te amaré solo a ti—Dijo con lágrimas falsas a penas lo descubrí engañándome.
Le dije miles de veces que no soportaría resultar herida de alguna relación y él lo hizo sin siquiera pensar en mi o en mi pequeño corazón destrozado.
Las lágrimas no cesaban de mis ojos recordando todas esas palabras dulces que luego solo fueron frases hechas y estúpidas que solo yo podría creerme. Mi pecho se comenzó a cerrar, intenté gritar pero nadie pareció oírme.
Casi sin darme cuenta me fui deslizando por el piso sin poder respirar, sin poder gritar o hablar y teniendo uno de esos malditos ataques, pero esta vez era un ataque aún peor de los que ya había tenido.
Me tendí en el piso intentando hacer lo casi imposible: respirar. Mis ojos se cerraron y ya no recuerdo más nada.

_______________________
Hola chicas espero que les guste! besitos

Otro blog: http://amorencopos.blogspot.com.ar/

Twiter: @Casijuegosca 

Cielo

viernes, 13 de diciembre de 2013

Capítulo 11 : "Después de todo"


Novela: "Entre Hermanos"
Capítulo 11 : "Después de todo"

Lali
Pasaron 2 semanas desde la fiesta en casa de Agustín. Cande se quedaría todo el verano, por lo que teníamos demasiado tiempo y compras por delante.
 — ¿Qué quieren comer esta noche? —Preguntó mamá.
— ¿Qué les parece si vamos a comer por ahí? —Dijo Cande.
— ¡Ya se! Invitemos a los vecinos que son buenos muchachos —Dijo mamá.
Yo mire a Cande y ella me entendió a la perfección, desde aquel día yo no había hablado con ninguno de los dos.
— ¿Por qué invitarlos? —Pregunté yo.
—Cada vez que los veo preguntan por ti, sería bueno invitarlos.
—Podemos invitarlos a que vengan acá, y vamos mañana a comer nosotras tres —Dijo Cande.
Yo la mire aun más indignada, sabía que quería que hablara con ambos o que me los comiera a los dos pero… hacerme esto.
—Ve Lali diles que están invitados está noche y mientras pensamos que hacer —Dijo mamá.
Yo no sabía que decir, si discutía tendría que dar razones. Salí de la casa y lentamente me acerque a la de mis vecinos. Toque timbre y me abrió la puerta una chica rubia, alta y flaca que vestía muy bien.
—Hola —Dijo— ¿Qué necesitabas?
— ¿Están Pablo y Peter?
—Pablo no, dijo que volvía en un rato y Peter se está bañando porque tuvimos un largo día, ya sabes —Dijo riendo.
—Sí, claro. ¿Puedes decirles que está noche mi mamá los invitó a comer?
—Les diré, pero Peter no creo que pueda porque me prometió llevarme a comer —Me sonrío— Es mi novio.
Apareció Peter en la puerta estaba con una toalla enredada en su cadera, y su torso al descubierto, con su pelo mojado. Se veía tan sexy.
— ¿Quién era?... Lali —Dijo al verme— ¿Qué necesitabas?
—Simplemente quería avisarles que está noche mi mamá los invita a comer a los dos, pero ya tu novia me explico que no podías, será una lástima —Dije.
— ¿Por qué no puedo? —Dijo él mirando a la chica.
—Creí que comeríamos juntos esta noche —Dijo.
—Solo venía a avisar y por favor dile a Poli, nos vemos —Dije yendo hacía mi casa.
Entre a mi casa y el corazón me latía a mil por hora. ¿Su novia? ¿Se supone que habían tenido sexo durante toda la tarde? Y lo peor de todo ¿Por qué me afecta tanto?
Cande me miró y comprendió que algo no estaba bien.
—No sé si vendrán —Dije como pude y subí a mi habitación.
Cande insistió toda la tarde pero no logró que dijera nada, en realidad ni yo misma sabía cómo me sentía.
Cuando llegó la noche Cande se baño primera y se puso un short de jeans oscuro con una musculosa verde agua al cuerpo y chatitas negras. Yo me bañe segunda y me puse un short corto, también, pero celeste claro y una musculosa fucsia con volados y mis chatitas blancas.
Eran pasadas las nueves cuando el timbre sonó. Cande fue a atender, yo me quedé en el sillón y vi entrar a Pablo.
—Hola —Dijo.
—Hola —Dije saludándolo.
—Espero que Peter no me haya mentido —Dijo riendo.
—Claro que no, estabas invitado —Dije.
— ¿Peter viene? —Preguntó mamá luego de saludar.
—No lo sé, dijo que tenía que hacer algo y venía.
Nos sentamos a la mesa y tocaron el timbre. Yo fui a atender y era Peter.
— ¿Llego demasiado tarde o la invitación sigue en pie?
—Creí que no vendrías —Dije mientras hacía unos pasos hacia la cocina.
—Lali —Dijo tomándome del brazo y evitando que avanzara— Ella no era mi novia y no tenía nada que hacer con ella, solo quiero que lo sepas.
—Está bien Peter, tú no me debes explicaciones —Le dije con una sonrisa y él me soltó.
Fuimos a la cocina, el se ubico al lado de su hermano mientras que yo lo hice al lado de Cande.
—Espero que les guste la comida, las tres mujeres de esta casa nos matamos haciéndola —Señaló mamá.
—Está muy rica —Dijo Pablo.
—Pienso lo mismo Emilia —Dijo Peter, al probar un bocado.
Habíamos preparado una buena fuente de rabioles con salsa casera.
—Creó que hace algo de calor y más con comida caliente —Dijo Cande— Voy a prender el ventilador.
Ella hizo lo dicho y se volvió a sentar para luego acortar.
—Aunque no es lo único caliente.
Peter me miro y entendí a que se refería Candela, esta chica estaba loca. La fulmine con la mirada.
—Chicos cuenten, ¿Estudiaron algo? —Preguntó mamá.
—Yo estudie profesor de gimnasia y soy entrenador del gimnasio del club, al que va Lali.
Mamá me miro sorprendida, sabía que iba pero no que él era mi profesor. Pablo también me miró con esa expresión y entendí que él no tenía ni idea.
—Y yo… —Dijo Pablo— Estudie administración de empresas y trabajo junto con mi padre.
— ¿Tu padre tiene una empresa? —Dijo Cande.
—Si es una empresa Industrial, Una empresa de Ford
—Esas son grandes empresas —Dije yo.
—Sí pero es una pavada, una vez que la conoces —Acotó Peter.
Y de repente me di cuenta de algo interesante, Peter no se llevaba bien con su padre y quizás por eso estudio algo totalmente distinto a su hermano.
—Lali ¿Tú que estudiaras?
—El año pasado termine la secundaria y este año no pude comenzar por diversos problemas, el año que viene comienzo aunque no sé qué todavía —Dije.
Después de estas vacaciones debía comenzar con algo, pero aun no me era tan fácil.
Seguimos hablando de diversos temas por un largo tiempo. Me enteré que Peter había estudiado durante 4 años y en este momento tiene 24, Pablo estudio por 3 años y ahora tiene 23.
Al terminar de cenar Emilia, Cande y yo limpiamos el lugar y lavamos los platos. Mamá se fue a acostar despidiéndose de todos.
— ¿Vemos una peli? —Preguntó Cande.
—Estoy ansioso por ver una de vampiros de Lali —Dijo Peter.
—No veremos una de las mías —Dije.
— ¿No tienes otras además de vampiros? —Dijo Pablo.
—Creo que sí —Dijo Cande— ¿Por qué no van Lali y Peter a buscar alguna y tu y yo nos quedamos a hablar? Vallan.
Yo la mire como matándola.
—Vamos Lali —Me tironeo Peter.
Subimos las escaleras, le indique mi cuarto y entramos.
— ¿Por qué me querías acompañar? —Pregunté.
—Oh vamos, siempre quise conocer tu cuarto —Dijo con sonrisa maléfica.
Sé que quiso decir otra cosa de lo que dijo.

Continuará...
_______________________
Hola chicas tuve un re problema en la compu que generalmente uso no me dejaba subir al blog me aparecían todas publicidades -.- descubrí que era culpa de la compu así que estoy utilizando otra :D perdón la demora creí que era problema de blog cuando en realidad era el de la compu -.- subire lo prometo besitos!!

Otro blog: http://amorencopos.blogspot.com.ar/

Twiter: @Casijuegosca 

Cielo

viernes, 29 de noviembre de 2013

Capítulo 10 : "Vámonos"


Novela: "Entre Hermanos"
Capítulo 10 : "Vámonos"

Lali
Cande tenía razón, por hoy debía dejar de lado las enormes paredes que construí hacia tipos así, debía divertirme.
Fui hacia donde había dejado a Peter pero no lo encontré. Aunque al rato de buscarlo lo vi, estaba bailando con una chica y si que sabe moverse, sus caderas se movían al mismo tiempo que ella y su cuerpo tenía demasiado movimiento. La persona que lo acompañaba era una rubia alta, de largas piernas y bailaba bastante bien.
Pude notar que él me vio y luego vi que le dijo algo a su acompañante y vino hacía mí.
— ¿Estas buscando a Pablo? —Preguntó serio.
— ¿Dónde está él?
—Se fue afuera con una chica bastante linda.
—Ah bien, pero no lo buscaba a él. —Dije y lo miré.
— ¿Quieres que te presenté algún amigo? —Preguntó inocente.
—En realidad… no —Dije vacilante.
— ¿Entonces…?
—No sé si estoy loca o que Peter, pero una amiga me dio un consejo y por hoy pienso hacerle caso.
—Entonces entiendo que quieres… ¿Bailar, tal vez?
—Suena muy bien —Dije tomando su mano.
Fuimos hacia la pista y comenzamos a bailar al movimiento de la música, el se apoyaba en mi bastante y debo decir que lo hacía bastante bien. Luego de 3 o 4 canciones, tal vez, el había logrado excitarme con solo hacerme bailar a su entorno, su manera de moverse cerca de mi me estaba matando.
Se estaba apoyando detrás de mí cuando me giré hacia él, quedando muy pegada y nuestras bocas estaban a milímetros de distancia.
— ¿Por qué me rechazaste y ahora quieres hacerlo? —Preguntó.
—No lo sé, pero no me hagas cambiar de opinión.
El me miro a los ojos y pude sentir como sus ojos azules penetraban mi marrón. Se acercó a mi boca sin quitar su mirada de mí, pude sentir su respiración fundiéndose con la mía.
Su boca se unió a la mía en un largo y profundo beso, su lengua busco la mía y mi boca se abrió dándole el paso necesario para probar su rico sabor. Tenía un gusto a menta mezclado con frutas, si… se puede decir que era un gusto menta frutal. Su sabor es celestial, su manera de besar lo es aún más. Puedo entender por qué muchas mujeres querían estar con él.
—Que dulce eres Mariana —Dijo al separarse de mí— ¿Y si ya nos vamos?
Lo miré y lo entendí, hacia demasiado tiempo que yo no tenía una aventura con un hombre, mejor dicho que no tenía sexo con uno. Pero no podía permitirle a Juan Pedro Lanzani, el mujeriego del lugar, entrar a mi cama así como así.
—Lo siento Juan Pedro, pero esto es todo lo que obtendrás de mí esta noche.
—Al menos dijiste esta noche, eso no quiere decir que no lo obtendré otro día.
Lo agarré de su camisa y le di otro beso.
—Lo siento Peter pero no —Guiñé mi ojo derecho y fui hacia el baño.
El me retuvo en la misma pared que antes.
— ¿Eres adicto a esta pared o qué?
—No, lo soy a ti.
—Si lo eres, hasta que te dé lo que buscas.
Le confesé más de lo que él creía, le estaba diciendo que no quería solo ser utilizada una puta noche, le decía que yo quería más que eso.
—Lo entiendo Mariana, me tienes miedo. Pero créeme nadie te hará lo que yo puedo darte Mariana, te deseo. —Su tono era ronco y grueso, mi piel se erizó.
—Lo siento —Dije— yo no puedo, sería como volver a mi pasado Peter y no lo deseo.
—De acuerdo Lali, lo entiendo. —Dijo a mi oído.
Luego bajo hasta mi cuello.
— ¿Así que te gustan los vampiros eh?
Cuando termino de decir eso, beso mi cuello lentamente y luego lo mordió con pasión.
— ¿Qué haces? —Pregunté con voz irreconocible.
—Te lo dije Lali, te deseo.
Me aparte un poco de él y lo bese con pasión en la boca.
—Peter, yo también te deseo y…
Y justo cuando creí que tendría la mejor noche de sexo junto con un mal chico pero uno que lograba excitarme en serio y que demostraba cuanto me deseaba, aparecen Cande y Pablo.
—Bueno bueno, lamentamos interrumpir pero ya nos vamos —Dijo Cande riendo.
Peter y yo nos separamos de golpe.
—Bien… vamos —Dije.
Los cuatro salimos del lugar después de despedir a Agus. Nos subimos al auto en silencio y nadie dijo nada hasta llegar al Country. Bajamos del auto y nos despedimos.
—Bueno, fue una linda noche muchachos —Dijo Cande.
—Sí, nos vemos mañana —Dije.
— ¿Podemos hablar antes, Lali? —Dijo Peter.
—No, no hace falta, nos vemos mañana.
— ¿Y conmigo no quieres hablar? —Dijo Pablo.
—Adiós chicos nos vemos —Dije saludándolos a los dos.
Con Cande entramos a mi casa y luego de pasar la puerta pude respirar con tranquilidad.
— ¿Qué sucedió allí Lali? Estoy muy contenta de que casi te lo llevaras a la cama.
—Ahí por dios, lo peor es que aún lo deseo Cande —Dije cubriendo mi cara con mis manos vergonzosamente.
Subimos a mi cuarto, nos vestimos para dormir, le conté todo y nos acostamos.
—Mariana ¿Te digo algo? —Ella continúo— si yo fuera tú, lo iría a buscar ahora mismo y lo haría mío. Lo deseas y él a ti. Pero claro yo no soy tú —Se giró y intentó dormir.
Esta chica ponía patas para arriba mi mundo, le comenzaba a hacer caso y eso no era bueno, yo debía dormirme y dejar de pensar en Peter o necesitaría que el venga a mi cama ahora mismo.
Después de tres horas de moverme en la cama, logré dormirme. Cuando amanecí eran como las dos de la tarde. Almorzamos lo que no dejó mamá. Subimos de nuevo a mi cuarto para bañarnos y cambiarnos. Cande se asomó a mi ventana mientras yo buscaba la ropa para ponerme.
—Mira eso. —Dijo y yo me asomé  a su lado— Son perfectos Mariana.
Peter se encontraba cortando el pasto del frente de su casa en pantalones cortos y en cuero. Pablo ayudaba cortando los arbustos con tijeras podadoras y se encontraba de la misma forma que su hermano.
— ¿Lo ves? Son un gran problema para una joven chica como yo.
— ¿Cómo pueden ser un problema? Yo que tú me hago alto trío.
— ¡Candela! —Le pegué.
— ¿Cómo besa Peter? —Preguntó.
Hablamos del beso-chape pero nunca había preguntado eso.
—Bueno… realmente bien —Dije sonriendo.
—Ahora debes probar a Pablo.
Yo la mire como si ella estuviera loca
—En serio no me mires así —Prosiguió— Ellos te desean y tú deseas a ambos.
—Ahora mismo Cande yo te prometo que no existirá un trió amoroso entre los Lanzani y yo, puedo firmarte un papel ahora mismo.
—Con lo fogosos y perfectos que son yo dudo que puedas, por más que quieras.

Luego de observar un rato más ambas nos bañamos y nos cambiamos. Hoy saldríamos por la ciudad.

Continuará...
_______________________
Hola chicas espero que les guste esta novela :) es hecha con mucho amor por mi besitos para todos

Otro blog: http://amorencopos.blogspot.com.ar/

Twiter: @Casijuegosca 

Cielo

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Capítulo 9 : "Un gran baile"


Novela: "Entre Hermanos"
Capítulo 9 : "Un gran baile"

Lali
Comimos unas porciones de pizzas caseras que preparamos con Cande, nos bañamos y nos colocamos la ropa elegida, nos maquillamos solo un poco, ella se plancho su hermoso pelo y yo me hice un pequeño recogido que dejaba algo de pelo suelto cayendo por mis hombros.
A la medianoche, como habíamos quedado, fuimos de mis vecinos. Tocamos timbre y atendió Peter.
—Pero si son dos pares de Cenicientas con la diferencia que en vez de irse vienen, adelante— Dijo abriendo la puerta para que pacemos.
—Hola chicos —Dijo Cande al ver a Pablo adentro sentado en el sillón.
— ¿Tú no saludas Bella Mariana? —Dijo Peter.
—Ja —Dije irónicamente— Hola.
— ¿Ya quieren ir o esperamos un rato? —Preguntó Pablo.
— ¡Por mi ya! —Dijo Cande —Pero quizás sea muy temprano.
—Si, por lo general las fiestas de Agus comienzan en su auge a las 2 —Dijo Peter.
—Y… ¿Es lindo tu amigo Agus? —Preguntó Cande.
Yo puse los ojos en blanco y me senté al lado de Pablo en el sillón, Peter y Cande se entendían bastante bien por sus manías de mirar personas de sus distintos sexos.
—Estas muy linda, Lali —Me dijo Pablo.
Pude sentir como Cande y Peter se callaban para mirar hacia acá, también pude sentir la mirada de Candela entusiasmada y la de Peter indignado.
—Muchas gracias Poli —Dije.
—En realidad lo sos —Dijo besando mi mejilla.
En ese instante me di cuenta que mis mejillas estaban rojas.
—Bueno —Carraspeó Peter— veamos una peli hasta la hora de ir.
—Me parece bien —Dijo Cande.
—Pero no tenemos demasiadas para ver —Dijo Pablo.
—Lali tiene muchas de vampiros —Dijo Cande.
— ¡Cállate! No veremos mis películas, veamos algo de la tele y ya.
— ¿Así que fanática de las mordidas en el cuello Mariana? —Dijo Peter riendo.
—Veamos que encontramos —Dije ignorándolo.
Cande se sentó en el sillón individual, mientras que Peter se sentó a mi otro lado. Pablo comenzó a cambiar de canales hasta que encontramos la película “American Pie: El reencuentro”. Nos reímos demasiado y cuando termino ya eran las 2 menos veinte.
—Ahora si ¿Vamos? —Pregunto Pablo.
Nos subimos al Mini Cooper azul con Peter de conductor.
—Me encantan los autos chiquitos—Dije.
—Este auto lo elegí yo, Pablo quería uno más amplio —Dijo Peter.
—Pero… Pablo fue más inteligente —Dijo Cande— Porque un auto más amplio te permite tirarte chicas detrás.
Yo puse cara de asco.
—No Cande para eso hay otros lugares —Dijo Peter guiñando su ojo derecho en el retrovisor.
Llegamos a una casa realmente enorme, era más bien una mansión en medio de Minnesota. Bajamos del vehículo que ya se encontraba en el estacionamiento y caminamos hacia la puerta del gran lugar, donde se escuchaba fuertemente el alto volumen de la música. Ingresamos y los cuatro nos dirigimos a una barra que se encontraba a la derecha de la entrada.
—Amigos que bueno que hayan venido y veo que con amigas eh —Dijo un chico apareciendo, saludando a Pablo y Peter.
—Agus ellas son Lali y Cande —Dijo Pablo.
—Un gusto muchachas —Nos dio un beso a cada una.
—Igualmente —Dijimos.
—Preciosa ¿quieres bailar? —Me preguntó.
—No Agus ella iba a bailar conmigo justo ahora —Dijo Peter.
—Perfecto macho lo entiendo, Cande ¿Tú qué dices?
—Por supuesto —Dijo ella.
Cande se alejo bailando con Agus. Yo no quería bailar por ahora así que evite el comentario de Peter y pedí un Daiquiri de frutilla.
— ¿Tomas? —Preguntó Pablo.
—No demasiado —Contesté.
—Ya puedes ir a buscarte alguna chica Peter —Dijo Pablo.
Peter lo fulmino con la mirada y se fue.
— ¿Por qué pelean? —Pregunté.
—El cree que su ex novia se entero que la engañaba por mi culpa.
—Y tú no hiciste nada ¿verdad?
—En realidad, yo le conté y luego ella lo vio con sus propios ojos. Pero ella no me creyó cuando se lo dije, así que técnicamente no tuve la culpa.
—Lo entiendo —Dije.
—No me gusta como utiliza a las mujeres, Lali. Solo por eso se lo dije.
—Te entiendo, en serio —Sonreí— espera que terminó esto y bailamos ¿dale?
—Me parece perfecto.
Termine mi daiquiri y salimos hacia la pista de baile. Pasaban música muy movida, por lo que no paramos ni un segundo durante un par de canciones.
En un momento pude ver a Peter, estaba cerca de los baños y por lo visto intentaba estar con alguna chica. Tenía a una arrinconada en la pared y parecía que tenían sexo en plena fiesta. Me dio bastante asco y vergüenza ajena.
—Pablo voy al baño ¿sí? Baila con alguien si quieres —Le sonreí.
Fui al baño, hice mis necesidades, me acomodé la ropa y el pelo. Salí del baño y sentí que una mano me tiro hacia una de las paredes. Muy conveniente, era la misma pared donde 5 segundos antes estaba casi teniendo sexo con una chica.
— ¿Qué haces Peter? —Le grite.
— ¿Tú qué haces Lali? ¿Intentas seducirme o que intentas hacer?
— ¿De qué demonios hablas?
—Me viste con esa chica, lo sé y luego vienes hacia acá ¿Para qué? ¿Para qué te vea o para que seas tú esa chica?
—Ya cállate ¿Quieres? Y ¡suéltame!
El me arrinconaba más hacia la pared.
—Dime la verdad Lali ¿Qué quieres? ¿Qué te bese? Solo tienes que pedirlo. —Se acerco a mi boca.
— ¿Puedes soltarme? —Le pedí— Por favor.
El me soltó lentamente.
—No quiero tus besos Peter, no soy una de tus chicas ya te lo dije. Y si vine hacía acá es porque necesitaba ir al baño, nada más. Ya déjame en paz.
Me giré hacia la barra y pedí otro daiquiri. Cande se acerco a mí.
— ¿Qué paso reina?
—Peter —Dije cansada— Se cree que como todas le dan bola, yo haré lo mismo y se equivoca.
—Espera un momento, Lali ¿Te quiso seducir?
—Yo diría que besarme directamente.
— ¿Qué haces aquí? Aprovecha que tipos así te dan bola, Mariana no seas fría. Por hoy sos libre de hacer lo que quieras ¿quedo claro? Ve y bésalo. Espero que me hagas caso o tendré que pegarte unas buenas patadas ¿Ok? Disfruta que los Lanzani están para comerlos con las manos —Sonrío y se fue en dirección a la pista, luego de guiñarme el ojo derecho.

Continuará...
_______________________
Hola chicas espero que les guste esta novela :) es hecha con mucho amor por mi besitos para todos

Otro blog: http://amorencopos.blogspot.com.ar/

Twiter: @Casijuegosca 

Cielo

domingo, 17 de noviembre de 2013

Capítulo 8 : "Visita"


Novela: "Entre Hermanos"
Capítulo 8 : "Visita"

Lali
Estábamos almorzando con mi mamá y sonó el timbre.
—Yo voy —dijo ella, se levantó y apareció en la puerta— No griten demasiado.
No comprendí al instante a que se refería pero cuando la vi allí no dude en gritar, ella mi confidente se encontraba delante de mis ojos.
— ¡Cande! —La abracé muy fuerte— Te extrañé demasiado.
—Yo también mi Lalu —Dijo estrujándome en sus brazos.
— ¡Par de locas ya cállense! —Exclamó mamá mientras lavaba los platos.
Cande y yo subimos a mi cuarto a hablar de todo lo sucedido en éste tiempo.
—Cuéntame ¿Qué tal los chicos? —Pregunté.
— ¿Recuerdas a Vico? —Yo asentí— bueno olvídalo, ya cortamos —Dijo riendo— sabes cómo soy Mariana y él no era para mí, aunque por lo que vi cuando venía para aca, hay demasiados chicos lindos que quizás podría aprovechar por aquí.
— ¿Cuánto tiempo te quedas Can?
—Unas semanas o si tú me lo permites, todo el verano —Dijo sonriendo.
Cande y su forma de ser tan divertidamente liberal es lo que siempre amé de ella. Nunca la vi realmente enamorada, siempre eran “aventuras” y eso era lo que la convertía en Candela Vetrano y no en cualquier otra persona que pisa este mundo.
—Claro que si, quédate a vivir si quieres
—Y dime niña esquiva, ¿y tus chicos? —Preguntó volviendo al tema.
Ella nunca me dejaba pasar de hablar.
—Oh tan genial —Dije irónica.
—Di la verdad Mariana
—Bueno… tengo vecinos lindos —Dije haciéndome la misteriosa.
— ¡Ya habla! —Exclamó.
—Cande tengo unos vecinos, dos para ser exacta y son… oh dios son perfectos —Dije sonrojándome.
—Podrías presentármelos —Río— ¿y dónde viven ambos?
—En la misma casa —Ella me miró sin comprender.
— ¿Son amigos?
—Oh no… —Ella largo su respiración en un suspiro que al instante se volvió a tensar— son hermanos.
— ¡Mariana! Eres una perra —Dijo riendo y deposito fuertemente un almohadón sobre mí cara.
—Lo siento, no tengo la culpa de que sean tan sexys
Seguimos hablando largo rato y eran las 4 de la tarde cuando me di cuenta que no había ido al gimnasio aún.
—Cande tengo gimnasio justo ahora ¿quieres venir?
—Pues claro, imagino esos culos sexys machos haciendo gimnasia… es tan genial.
—Y podrás conocer a uno de los hermanos.
—Genial, vamos ya —Dijo entusiasmada.
Me vestí para hacer gimnasia, se que ella lo odia así que no haría en todo el verano pero estaba segura que me acompañaría solo para ver a hombres musculosos.
Llegamos e ingresamos, pude ver a Rochi en una de las máquinas y nos acercamos a ella. Ella paró la máquina para hablar con nosotras.
—Roció Igarzabal ella es mi amiga de Wisconsin Candela Vetrano. Cande ella es Rochi la mejor amiga de mi vecino.
Candela no entendió de los dos vecinos ya que aún no le decía los nombres.
—Un gusto Rochi —Dijo ella.
—Igualmente Cande —Le sonrío Rochi.
Y tenía que aparecer…
— ¿A mí no me vas a presentar Lali? —Dijo apareciendo detrás de nosotras.
—Cande él es uno de mis vecinos, el más odioso para aclarar, Juan Pedro Lanzani —Dije.
—Claro que no soy el más odioso y dime Peter —Dijo él coqueteando como siempre.
Yo puse los ojos en blanco y él lo notó, por lo cual largo una risita burlona.
— ¿Vas a entrenar Cande? —Preguntó Rochi.
—Oh no, yo vengo a ver a los chicos haciendo —Dijo sonriendo.
—Tienes bastante en común con Peter —Contesto ella riendo.
—A entrenar muchachas y Cande a mirar —Dijo Peter graciosamente.
Yo hice un par de horas de distintos ejercicios puestos por mi entrenador “el sexy Lanzani”, me equivoque era “el odioso Lanzani”.
Después de un largo rato y una buena transpirada, con Cande decidimos irnos.
—Vamos juntas —Dijo Rochi.
—Bueno, vamos —Dije.
—No llegue a verlos a todos—Dijo Cande enojada.
—Mañana volvemos—Dije poniendo los ojos en blanco.
— ¡Sí!, entonces vamos —Dijo ahora apurada.
Peter se tuvo que quedar porque había personas que necesitaban ser entrenadas.
Rochi tomó rumbo para su casa y nosotras seguimos hacia la mía, subimos a mi cuarto.
— ¿No hay fiestas por acá? —Preguntó Cande.
—No lo sé, no hace mucho que estoy acá Cande —Dije irónica.
— ¡Ya sé! ¿Por qué no le preguntas a tus sexys vecinos? ¡Aún mejor! Vamos y conozco al otro —Dijo ella contenta.
Y no me quedó otra que hacerle caso a Cande, salimos de mi casa y fuimos de mis adorados vecinos Lanzani. Tocamos timbre y atendió Pablo.
—Hola Lali y… —Dijo él.
—Cande —Completó ella.
—Pablo, ella es mi amiga de Wisconsin y vino de visita.
—Un gusto —Dijo él.
—Igualmente Pablo, veníamos a ver si sabes de alguna fiesta para ir —Dijo ella.
—Si claro, un amigo nuestro hará una fiesta en la ciudad. Están más que invitadas.
—Genial, ¿Dónde? —Siguió ella.
—Esperen ¿son ustedes dos?
—Si —Contesté yo.
—Vengan a la media noche y vamos juntos, total nosotros somos 2 y ustedes también.
— ¡Genial Pablo! Qué buena onda este vecino —Dijo ella guiñándome su ojo derecho.
Fuimos hacia mi casa de nuevo a elegir la ropa para la noche, ya que Cande es la mejor en eso.
—A ver, esto te quedará genial —Dijo poniendo sobre mí un vestido negro corto.
—No me gusta, olvídalo —Dije.
— ¡Ya se! —Abrió su maleta— prueba esto —Dijo lanzándome un vestido rojo.
Entre al baño y me lo coloqué, salí a la pieza y cuando Cande me vio no lo podía creer.
Debes ponerte ese sin duda, los hermanos Lanzani se caerán de espaldas.
El vestido era rojo pasión corto por arriba de mis rodillas, algo apretado arriba y la parte de la falda caí abiertamente, en la espalda tenía una abertura que dejaba ver mitad de mi espalda. Es realmente precioso y con una buena recogida de pelo y los zapatos rojos de Cande quedaría aún mejor.

Cande se decidió por un vestido azul marino que yo tenía que era bien apretado y corto, también se pondría sus zapatos negros y se dejaría el pelo suelto y planchado

Continuará...
_______________________
Hola chicas espero que les guste esta novela :) es hecha con mucho amor por mi besitos para todos

Otro blog: http://amorencopos.blogspot.com.ar/

Tw: @Casijuegosca 

Cielo