Capítulo 1: "Un camino liso"

Novela: "Entre Hermanos"
Capítulo 1: "Un camino liso"

Lali

— ¿Estás lista? —Exclamó mi madre desde el primer piso

—Aún no —Grité al borde del enojo.

Nadie podía apurar a Mariana Esposito y además ni que fuera mi idea mudarme.

—Llegaremos tarde —Contestó Emilia, mi madre apurada, como respuesta

Baje con mi última valija.

— ¿Contenta?

—No hasta que lleguemos allí y el hombre aún esté —Contestó

Mi madre Emilia Attias y yo siempre viviendo en distintas casas aunque prometió que ésta sería la última hoy estamos mudándonos. Nunca confíes en la palabra de una madre que no encuentra lo que quiere hacer con lo que le queda de vida.

Encontró una casa en un country —los odio son tan de chetos— y decidió que era seguro para una madre de 40 sola con su pequeña hija de 20 años ¿irónico no? Toda la vida viviendo en cualquier lado ni traba poníamos a la hora de dormir y ahora en un country por "seguridad" después de grande quisquillosa.

Aún no había firmado contrato con el señor, hoy a las 10 de la mañana era el horario pero nos levantamos tarde y ya son 10 y 30, tenemos suerte si aún nos espera. ¿Mi padre? eso mismo pregunto yo ¿quién es? ¿Dónde está? según mi mamá ni ella sabe, eran sus épocas de diversión pero al fin y al cabo estamos juntas en esto.

—Arranca Lali —Gritó mi mamá

Me llama Lali desde que tengo uso de razón, nunca supe porque ni me interesa porque amo ese apodo.

Yo conducía todo el tiempo desde que tengo carnet, aunque antes lo hacía pero no por plena ciudad, mi madre dejo de hacerlo a las 35 tras tener un accidente. Yo con mis 15 la llevaba por todos lados, hasta que pude sacar mi carnet y ya lo hago sin privaciones. En ese accidente casi la pierdo estuvo internada 1 mes y aunque se recuperó nunca quiso volver a manejar.

—Llegamos —Exclamé al ver el gran cartel "Country´s Park"

Si me preguntan diría que es un hermoso lugar pero no me veo aquí, odio a los chetos y esto supongo que es el barrio clásico de chetos. Lo peor no es que existan ellos, lo peor es tener que compartir con ellos un mismo lugar.

— Má —Exclamé— Busca al señor y yo si queres descargo las valijas

—Me parece genial —Se fue hacía la dirección anotada para buscarlo

Yo comencé a descargar las cosas empacadas, se me complico a la hora de bajar una caja, era enorme no sé qué contenía pero pesaba mucho.

— ¿Te ayudo? —Dijo la voz de un chico

— ¿Podrías por favor? —Él tomó la caja de mis brazos —Gracias

—De nada —Dijo dejando la caja en el suelo —Así que se mudan a ésta casa eh —Trató de sonar como pregunta pero parecía una afirmación

—Si —Dije— ¿Ya todos saben de las nuevas vecinas?

— ¿Sabes esa frase de "Pueblo chico infierno grande"? —Yo asentí— Esto no es un pueblo pero puedes ver que lo parece —Ambos reímos— Soy Pablo ¿tú eres?

—Por lo menos no saben todo —Dije burlándome— Soy Mariana Esposito, pero prefiero Lali

—Me parece bien, Lali, a mí me gusta que me digan Poli

—De acuerdo, ¿dónde vives?

—Justo al lado de tu casa, esa es la mía —Dijo señalando

—La marroncita clara, me gusta es lindo ese color ¿vives solo?

—Oh no ojalá —Exclamó— vivo con mi hermano y su estúpida novia

—Suena genial —Dije riendo—

—Hija —Metida como siempre...

— ¿Qué?

—Ya está todo arreglado, podemos subir las cosas —Reparó en Pablo— ¿Él es?

— ¿Él tiene boca porque no le preguntas? —Dije

—Pablo Lanzani —Se adelantó el estirando su brazo— Un gusto... —Le dio lugar a ella, que le estrecho la mano

—Emilia Attias, soltera por si preguntas —Giñó su ojo derecho

—Pablo no le hagas caso ella coquetea con todos, por eso nunca le presento chicos —Dije bromeando y ambos nos reímos mientas cargábamos unas cajas al interior de esa casa blanco pálido que me asustaba.

Al cabo de 3 horas todo estaba dentro y casi en su lugar, solo faltaba buscarle lugar a un par de cosas y listo.

—Pablo no tienes que ayudar en todo —Dije enojada porque mi mamá se aprovechaba de él

—Está bien Lali, igual ya es hora de irme mi cuñada me matará si no saco a Amy a hacer sus necesidades

— ¿Tienes un perro?, ¿te puedo acompañar? amo los perros pero mamá nunca me dejo tener uno

—No me eches la culpa a mí ya demasiado nosotras como para alimentar a una mascota —Eso me hizo poner los ojos en blanco

— ¿Vamos? —Le pregunté a Pablo, el asintió

Lo esperé afuera de mi casa y el salió con su perrita, era una Golden Retriever grande y se notaba que la cuidaban muchísimo

— ¿Es tuya? —Pregunté mientras la acariciaba

—Ojalá, mi hermano se la regalo a mi cuñada y ella la detesta, es tan odiosa

—Por odiosa te refieres a tu cuñada ¿verdad? Porque esta bolita de pelos es súper agradable —le acaricie detrás de la oreja —que linda perrita —hice voz tonta mientras le hablaba a Amy

Pablo y yo comenzamos a caminar, él me enseño todo el Country. UN CLUB PROPIO ¿no es increíble? Todos los deportes concentrados en un club de un country, ni siquiera debes salir a comprar nada ya que también hay un supermercado. Es el country más grande que vi nunca.

—Esto es increíble —Exclamé

—Sí, es un hermoso lugar —Sonrió— Lali una vez que vienes aquí ningún otro lugar te parecerá tan bonito nunca

—Ahora entiendo porque lo eligió mi mamá

—No solo por la seguridad, esto es el country más grande del país

Seguimos recorriendo y luego nos despedimos cada uno en nuestras casas. Con mamá cenamos lo que encontramos aun comestible ya que ninguna de las dos había ido al supermercado a crear provisiones. Ella se acostó temprano y yo decidí salir afuera, me senté en la escalera que daba con el alero de la casa.

Cuando me iba a ir adentro otra vez yo escuche un par de gritos de la casa de al lado, la de Pablo y supuse que algo estaba pasando, así que decidí quedarme sentada a esperar por si salía él y necesitaba algo

Menos de diez minutos después los gritos se cayaron, la puerta se abrió y salió una chica con una gran valija.

—ME VOY —Gritó ella

—No te vayas —La persiguió Pablo— Sé que hizo todo mal pero él te quiere

—Debió pensarlo antes de meterse con esa perra —Estaba furiosa y lloraba

—No te vayas, habla con él

—No pienso hacerlo Poli es un mal chico, sé que te trate mal a vos todo el tiempo y te pido perdón, tu siempre fuiste el único en esa casa que me defendía de todo perdóname por todo lo que dije o hice en tu contra —Le dio un abrazo rápido— gracias Poli, nos veremos algún día

Ella se subió a su auto y arrancó, solo se vio el polvo que dejo al marchar. Yo mire hacía Pablo se lo veía destruido, me miro, luego miro al piso y entró.

Después de un rato se escuchó otra vez la puerta y salió Pablo sacando a quien supongo era su hermano

—Ahora mismo vas y lo arreglas —le cerró la puerta en la cara

El chico bajo los escalones y al darse cuenta que yo estaba allí me miro y se acercó a mi

Continuará...

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Hola chicas espero que les guste esta novela :) es hecha con mucho amor por mi besitos para todos

@Casijuegosca 

Cielo